Hace unos días su dueño me comentó que al perro algo le pasaba pero que no cazaba de la forma que lo hacía, y parecía como si no quisiera cazar, algo muy raro. Pues bien, los síntomas que el dueño me transmitía no eran más que un miedo a los tiros, y en esta ocasión incluso miedo a la propia pieza.
Como ya hemos comentado en alguna ocasión, los perros disponen de una inteligencia asociativa. En esta ocasión, Luca había asociado la pieza con la posterior detonación, lo que afectó a su comportamiento natural. Afortunadamente, esta asociación no había llegado a su fase más alta, lo que podemos considerar fobia, y con mucho trabajo Luca se va recuperando.
En el video que pondremos a continuación, veremos con al detectar la emanación de la codorniz, Luca muestra y guía perfectamente la pieza, pero ¿Que hace Luca cuando salta la codorniz y vuela?
Debido a esta asociación que comentábamos anteriormente, Luca no persigue la pieza de forma natural, si no que permanece unos segundos en posición de quieto, para, a continuación, comenzar la persecución de la codorniz. Esta tímida persecución, es uno de los resultados del trabajo que hemos estado haciendo con Luca durante unos días.
Alguno de vosotros os preguntareis ¿ Se ha trabajado los respetos al vuelo con Luca? La respuesta claramente es NO. Como hemos comentado, esta inmovilidad ante el vuelo de la pieza, viene condicionada por el miedo a los tiros y a la pieza de este epagneul breton.
A continuación os dejamos el video donde vereis reflejado lo que os he comentado. Espero que os guste.